Víctor Castro Cosío, Superdelegado Federal no ha sabido agradecer la ayuda, el ISSSTE se cae a pedazos.
Trabajadores del ISSSTE en Baja California Sur están desesperados por la reapertura de actividades que se dio desde el pasado lunes 31 de agosto, pues consideran que la pandemia por coronavirus está muy activa.
La situación está de color hormiga, pues al menos en el Hospital Conchalito el personal ya escasea, las guardias son cada vez más duras y no hay una autoridad que alce la mano para ayudarlos, están desprotegidos.
“Nosotros diario nos estamos partiendo la madre, diario hay más contagios, diario hay más gente muerta, no nos damos abasto, ya van 85 a 90 compañeros incapacitados por infección de COVID, y dónde están las autoridades, ya no puedo más, necesito un día para dormir, uno solamente y ahorita no podemos darnos el lujo de faltar, no nos dejan”, lamentó.
Empleado del ISSSTE Conchalito.

Cruda pero real, esta es la difícil situación por la que atraviesa el ISSSTE Conchalito.
Mientras afuera Víctor Castro, Coordinador de Programas Federales se preocupa más por las encuestas, por tratar de subir puntos, y dejó de lado los problemas que preocupan en este momento.

La pandemia que ha arrebatado la felicidad a cientos de familias y que sigue amenazando a otras cientas más.
La molestia es generalizada, incluso tuvieron que llegar autoridades de nivel central a conocer la problemática, porque nadie informa.

“Mientras nosotros seguimos arriesgando nuestra vida, el flamante superdelegado está más preocupado por hacer campaña”, denunció.
Empleado del ISSSTE Conchalito.
El pasado primero de septiembre, acudió el titular del Órgano Interno de Control, de la Dirección de Vigilancia y de Normativa del ISSSTE para conocer el problema que atraviesa la institución.

Cuando el Superdelegado Víctor Castro Cosío cayó en cama, enfermo de COVID, solicitó inmediatamente su alta voluntaria, debido a que día y noche eran muchos los trabajadores que se acercaban a solicitar ayuda.
Hoy la única ayuda que han recibido es una licencia médica, que han tenido que tramitar ellos mismos con el Director General en Ciudad de México.

La demanda de los trabajadores del ISSSTE ya sobrepasó a Víctor Castro, su ausencia es clara y los problemas se sienten, no es tanta la falta de camas de hospital, ya no hay personal para atender pacientes.